Naranjas, limones y kiwies son todas frutas ricas en Vitamina C, Ácido Fólico (que previene la anemia), fibra (ayuda a la digestión) y otros antioxidantes. Ésta mezcla de componentes les otorga a estos frutos un efecto protector sobre enfermedades cardiovasculares y cataratas, en la edad avanzada. También evita los resfrios; un estudio realizado en 2006 con esquiadores, corredores y soldados en el Ártico, demostró que una dosis de 250 mg al día redujo la incidencia de resfrios en un 50%.
Además una investigación de la Sociedad Americana del Cáncer reveló que no sólo la pulpa de estas frutas entregan beneficios, también su cáscara; tiene aceites esenciales como el limoneno y el alcohol perílico , este último reconocido como un agente preventivo del cáncer.
Se sugiere consumirlas enteras y como jugo.
La porción sugerida es de una naranja, un limón o dos kiwis al día
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